El pasado viernes 13 hubo un doble atentado en Pakistán para "vengar a Bin Laden" en el que mueren 88 personas y al menos 150 resultan heridas 25 de estas graves.
11 días después de la muerte de Bin Laden ha sucedido un doble atentado en la academia de un cuerpo de fuerzas de seguridaden el norte de Pakistán (en la ciudad de Charsada), cuando volvían en autobuses a sus domicilios tras varios días de entrenamiento. Entre los 88 muertos (79 reclutas y 9 civiles), 15 cadáveres quedaron totalmente calcinados y 20 vehículos han quedado calcinados.
El primer ataque suicida llegó en una moto y detonó su chaleco entre los hombre de la policía de Fronteras.
Cuando otros policías fronterizos llegaron para ayudar a las victimas, un segundo ataque, también motociclista, se inmoló.
Un portavoz del movimiento talibán pakistaní aseguró en una llamada telefónica que "Es una venganza por la muerte de Bin Laden" y que "Continuaran nuestros ataques con las fuerzas de seguridad".
Tras las muerte de Bin Laden, varios analistas señalaron que la respuesta violenta más inmediata se daría dentro de Pakistán y que provendrían de islamistas radicales opuestos al Estado pakistaní.
Según indica un experto en temas de seguridad, "hay mucho enfado en este grupo por la forma en que murió Bin Laden y por la manera que intervinieron las fuerzas estadounidenses en el corazón del Pakistán.